Ven aquí, vamos a cuidar el uno del otro
El equilibrio entre nuestra razón y nuestras emociones es fundamental para nuestro bienestar físico y mental.
Cuando estamos equilibrados: – Tomamos mejores decisiones. – Salimos del ámbito de las reacciones automáticas y abrazamos el de las respuestas elegidas (pensamos, respiramos y racionalizamos antes de responder). – Tenemos clara la diferencia entre la sinceridad (no decir el opuesto de lo que pensamos y cuidar del cómo lo hacemos) vs. sincericidio (al hablar con el otro nos falta filtro, empatía y prudencia y no tenemos en cuenta sus sentimientos). – La autogestión emocional nos fluye – somos capaces de manejar lo que sentimos y no nos enganchamos con nuestras emociones. – Somos capaces de nos concentrar en lo que estamos haciendo. – Entendemos el balance entre hechos y juicios + instintos. – Practicamos la empatía de manera natural y genuina para poder ayudar y aportar valor al otro. – Vemos lo macro y lo micro de los temas. – Sabemos y aceptamos que no somos el centro del “universo”. Y cómo anda tu equilibrio racional y emocional?