¿Te pasa algo? ¿A mi? No nada
Te pasa eso con frecuencia?
Tratar de ser “fuerte” y “fingir” que todo está bien para mantener la imagen que crees que tienes frente a los demás mismo cuando en tu interior estás angustiado, agotado, frustrado, preocupado o cansado?
Para qué que lo haces?
Y por tratar de complacer o no preocupar a los demás a quien estás hiriendo o negligenciando?
Exacto…a ti mismo! Tu y tus necesidades.
Vale la pena?
No tenemos que ser super héroes para ser grandes personas. El respeto y el aprecio de los demás no es generado por tu capacidad de ser “perfecto” (lo que no existe) o de siempre aparentar estar “bien” sino por tus valores, virtudes, personalidad, fortalezas, gestos, palabras y actitudes. Siempre que necesites, hacerse vulnerable (el coraje y la valentía que nacen de tu autenticidad para asumir tu imperfección y tus necesidades) solo te ayudará a conectarte y a crear lazos aún más fuertes y genuinos con tu entorno.
Feliz semana!