Cómo creemos que se logran las metas
Cuando soltamos la exigencia y el perfeccionismo, somos capaces de entender, aceptar, vivir y aprender de los altibajos de nuestros procesos.
No somos superhéroes y nuestro entorno no es estático; somos humanos maravillosos pero imperfectos viviendo en entornos imprevisibles y cambiantes. Es clave ser responsable y trabajar desde la excelencia en lo que está en nuestras manos y depende de nosotros pero también de saber identificar y aceptar lo que no está en nuestras manos y no depende de nosotros.
Desgastarnos y “quemarnos” tratando de controlar a todo y a todos solo nos llevará a un ciclo vicioso de inseguridad, dudas, miedos, rigidez y terquedad.
Celebra y vive tus procesos con todo lo que ellos tienen para enseñarte…así crecerás siempre con cada uno de ellos.